viernes, 5 de agosto de 2011

capitulo diez


En una fría mañana de un día como cualquiera, se despertaba Aura, una niña de ojos azules como el reflejo del mar, sonrisa encantadora y mirada tierna. Ella, al igual que en otras mañanas, revisa su balcón para poder contemplar el amanecer. Hoy se encontró con una sorpresa yes que el sol no ha salido, siendo las 7 de la mañana, ella sorprendida se hace preguntas acerca de esta situación, volviendo a otras preguntas sin respuestas.
En este momento de confusión, ella se queda mirando hacia el horizonte esperando que el sol salga y la salude, acariciándole su carita con su calor, pero no tiene respuesta alguna, decide entonces deshacerse de sus preguntas y entrar a su habitación para continuar su día normalmente.
Siente una suave brisa que le roza su cuello y la hace erizar, la brisa entra a ala habitación y gira por entre el ropero, rodea la lampara de noche, se mete debajo de la cama, acaricia las cortinas, y al salir vuelve y roza el cuello de Aura acercándose mas a su oreja izquierda y con el ultimo susurro de aire le dice: "hoy eres tu el sol que he estado esperando".

Aura queda desorientada.
Aura piensa.
Aura medita.
Aura no se da cuenta de que en algún lugar del mundo ella es el sol que salio al balcón dándole abrigo al mundo entero, y es el aire frío quien le advierte que no se debe entrar ya que el día se torna mas oscuro de lo que aun es.
Aura no se imagina que esta es la respuesta que ha estado pensando y decide ocultarse en su habitación.
Triste esta el mundo.
Triste las colinas, los prados, los animales, los girasoles, las nubes, los ríos, los mares, los peces, las aves, el viento y yo.
sal Aura y regala una sonrisa cálida.
NECESITO DE TI, COMO EL SOL EN LAS MAÑANAS.


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